Desde el inicio de la guerra, en febrero de 2022, las niñas y niños ucranianos han quedado expuestos a la violencia, los traumas, la destrucción y el desarraigo de sus hogares. También han sido afectados por el daño a escuelas, hospitales e infraestructura clave para su desarrollo y bienestar.
Con tu apoyo, UNICEF estuvo en terreno, trabajando incansablemente para proteger los derechos de la niñez ante esta catástrofe humanitaria que les ha impedido crecer en un entorno seguro y protegido.
En paralelo, esta guerra produjo la mayor crisis del mundo actual por desplazamiento de personas hacia países vecinos. En noviembre de 2022 habían llegado a toda Europa 7,7 millones de refugiados desde Ucrania, el 90% de los cuales eran mujeres y niños. Gracias a tu compromiso con ellos, UNICEF activó una respuesta frente a esta emergencia y apoyó a los gobiernos de las comunidades anfitrionas de 19 países para garantizar que recibieran protección y servicios inclusivos.